El miércoles 1 de enero, el padre David Halm C.S.C. asumió como rector de esta comunidad que conoce desde su anterior cargo de director de pastoral. Es una comunidad que ha aprendido a conocer, a querer y que la vive como la extensión de su familia.
Los sacramentos de Primera Comunión, reconciliación, confirmación, la celebración de la eucaristía, la evangelización y el servicio a los demás han sido el sello del padre David en estos primeros cuatro años en el Saint George.
Padre David, ¿cuál fue su primera reacción?
Humildad. Sé que el Saint George’s College es una familia enorme con una historia destacada y larga. Tenemos más de 2.600 alumnos y alumnas, casi 300 profesores, administrativos y auxiliares, 1.400 familias y me siento muy humilde y pequeño frente a la oportunidad presentada. Pero también me siento con muchas ganas y confianza porque tenemos un equipo excelente. No solo el equipo directivo, también nuestros profesores y profesoras, colegas, alumnos y alumnas, y familias. Estamos juntos, por eso tengo confianza y me siento feliz.
En la congregación tenemos tres votos: castidad, pobreza y obediencia. El voto de obediencia no es como antiguamente, cuando recibíamos una instrucción y nos íbamos, sino que tenemos conversaciones y hacemos oración. Pero finalmente la decisión de nuestros trabajos y donde estamos es por el discernimiento del superior, en este caso del padre Pepe Ahumada C.S.C con su consejo del distrito Chile-Perú y con nuestro superior provincial. Creo 100 por ciento que el Espíritu Santo nos guía y, en este caso, con humildad, creo que fue la decisión del Espíritu Santo para nuestra congregación.
Cuando contó esta noticia a su familia ¿qué le dijeron su mamá y sus hermanas?
Por un lado están un poco tristes, porque significa más años muy lejos de ellas y de mis sobrinos. Por otro lado, ellas saben que quiero al Saint George, que es mi familia aquí. Me ha visitado mi hermana Elizabeth y también mi mamá, ambas conocen el Saint George. También tenemos Facetime y Whatsapp, por eso es más fácil comunicarnos entre Estados Unidos, Irlanda, donde está mi otra hermana, y Chile.
Tras 4 años como director de pastoral, ¿cuáles han sido sus aprendizajes en el colegio?
Aunque mi español es básico y tiene muchos errores, un aprendizaje enorme es el idioma, la cultura del colegio, y la de Chile. He aprendido que esta comunidad del Saint George es una familia, que tenemos conversaciones francas, honestas y también tenemos respeto y amor por los otros. Tenemos una diversidad enorme en política y en perspectivas; dentro de ella, nuestro compromiso compartido es con la misión del colegio y finalmente con Jesucristo.
En vista al Proyecto Educativo Institucional, ¿cómo ha planificado el 2020?
Diría que es importante recordar que no es un nuevo Proyecto Educativo, sino que es un Proyecto Educativo actualizado y aprobado por la congregación. Es importante recordar que los próximos cinco años no son de un cambio, sino que es en un sentido la continuación de un proyecto educativo de más de 80 años en el colegio.
Por mi parte estoy muy feliz de saber que nuestro equipo y toda la comunidad será parte de la planificación estratégica 2020-2025.
Sin duda, la prioridad del proyecto educativo es nuestro compromiso con Jesucristo. Lo cumplimos en nuestras clases, en oportunidades de servicio, en oportunidades de conversación y charlas; como formadores, educamos a la persona entera, en su formación en deportes, música, artes, en los vínculos con Nuestra Señora de Andacollo, en vínculos con los apostolados de la congregación. Creo que también será importante la conversación nacional que ya ha partido y que se viene en los próximos años. En 2020 vamos a seguir con el trabajo de planificación estratégica y también vamos a describir o definir mejor lo que significamos cuando decimos estas prioridades.
¿Usted va a proponer esas prioridades o se trabajarán con el Consejo Directivo?
Siempre trabajamos como equipo. Como padre Jim comunicó, todo el próximo año vamos a definir el plan estratégico: todos los integrantes de la comunidad trabajaremos juntos, escucharemos, conversaremos, compartiremos y, finalmente, propondremos prioridades al distrito Chile-Perú de la congregación para que ellos también puedan apoyarnos.
Para nosotros lo más importante es el compromiso con Jesucristo y seguir en nuestra misión de formar alumnas y alumnos que sean cristianos comprometidos y ciudadanos competentes. Es crucial reforzar a la persona entera. Que todos los alumnos y alumnas se sientan seguros, protegidos en el colegio, que crezcan en sus talentos humanos, intelectuales, deportivos, musicales, artísticos y de solidaridad. Por eso hoy no es el día de definir énfasis. Es parte del plan del próximo año construir el PLAE.
¿Cómo le gustaría ver el Saint George’s College en 80 años más?
¿¡80 años más!? Difícil saber qué va a aparecer en el mundo en 80 años más, pero ojalá como siempre: una comunidad comprometida con Cristo, con la construcción de su Reino en el mundo, un reino de paz y justicia, un reino donde cada persona se sienta digna, bienvenida, querida, respetada. Me encantaría ver un colegio donde todos y todas se sientan hijos de Dios y amados. Tengo esperanza que cuidemos del medioambiente del colegio y que en el año 2.100 sea aún verde y sustentable. Obviamente que sigamos formando jóvenes en la investigación de la verdad, desarrollo de sus talentos y que egresen al mundo preparados como ciudadanos competentes y cristianos comprometidos.
¿Cuál es su mensaje para la comunidad georgiana?
Te quiero y cuenta conmigo. Es súper importante que contemos los unos con los otros. Voy a escuchar, necesito las sugerencias y consejos de la comunidad, ruego todos los días para recibir la sabiduría del Espíritu Santo. No soy perfecto y les pido sus oraciones y paciencia, sobre todo al principio. Le doy gracias a mis hermanos en la Congregación de Santa Cruz por su fraternidad y apoyo. De verdad espero que todos y todas se sientan cómodos para conversar conmigo y con nuestro equipo directivo. I’m very excited to be here! I look forward to these next 5 years…
Lea la primera entrevista que dio padre David Halm C.S.C al colegio en su primer aniversario sacerdotal en abril de 2016.
Padre David Halm en su primer aniversario sacerdotal
“La esencia del sacerdocio es transmitir el amor de Jesús”
El padre David Halm, director de pastoral del Saint George’s College, cumplió su primer año de sacerdote este lunes 11 de abril. A continuación les presentamos parte de su historia vocacional.
Hijo de John y Deborah, nació el 2 de agosto de 1981 en Ohio, Estados Unidos. Es el mayor de cuatro hermanos, la lista la completa Molly, Elizabeth y Caroline. Le gusta comer comida mexicana, escuchar a Smashing Pumpkins y el club de fútbol americano Sun Devil Athletics de Arizona. No conoce otra ciudad distinta a Santiago, pero anhela pisar la Patagonia y el desierto de Atacama. Más allá de estos datos, lo más distintivo de él es su servicio a las personas a través del sacerdocio.
Su infancia la pasó en Ohio y cuando decidió estudiar finanzas lo hizo en la Universidad de Notre Dame, ubicada en Indiana. Allí conoció a sacerdotes de la Congregación de Santa Cruz y lo que más le llamó la atención de ellos fue su alegría y servicio: “En muchos de sus sacerdotes vi a hombres de alegría, con los pies en la tierra, que entienden los problemas de las familias y de la comunidad”. Esto le hizo mucho sentido, porque “quiero ser sacerdote con la gente, no sobre o bajo ella, junto con mis hermanos en la fe en la parroquia o en la escuela”, confiesa.
Si bien es cierto que luego de graduarse de la escuela de economía y finanzas trabajó en bancos de Chicago y le gustaba mucho esta tarea, buscaba trascender a ello. Lo que lo marcó mucho fue la crisis financiera de 2008. Cuando muchos de sus compañeros estaban desempleados y tristes él seguía buscando más allá y sus pensamientos iban constantemente al servicio eclesial. “Oí el llamado de Dios a servir como sacerdote. Cada persona tiene un llamado especial de Dios, para la mayoría es la vida de mamás y papás, pero en mi caso, Dios me llamó a la vida sacerdotal”, explica.
Sacerdote de Jesús
“Más allá de ser sacerdote estadounidense o chileno, todos somos sacerdotes de Jesús –puntualiza-. La esencia del sacerdocio es transmitir el amor de Jesús, vivirlo y mostrarlo con misericordia, caridad, paciencia, generosidad y honestidad hacia todas las personas”.
Recibió la ordenación sacerdotal un 11 de abril de 2015 en la iglesia de Notre Dame junto a otros cinco sacerdotes. Luego, lo destinaron a la Parroquia San Juan María Vianney en Arizona, donde junto con estadounidenses hay mucha población mexicana, también de Guatemala, Salvador y Nicaragua. “Es una comunidad inmensa con 4 mil familias –comenta-. En mi primer año celebré 21 bodas y 56 bautizos”. De los ciudadanos mexicanos o con ascendencia destaca “su gran amor por la Virgen de Guadalupe y su espíritu familiar; para ellos valores importantes son la lealtad, la religión y la fraternidad”. También recuerda sonriendo la comida rica: tacos, burritos y tamales en Navidad. “¡Me gustan mucho!”, dice.
La tradición georgiana
Cuando le propusieron venir al Saint George’s College cuenta que le interesó de inmediato por su historia, “tiene una gran tradición de excelencia, de fe y de comunidad”. Y cuando nos visitó en noviembre de 2015 y ayudó en las misas de las Primeras Comuniones se impresionó con la fe de los alumnos, sus padres y los profesores.
Reconoce que muchas veces el idioma es una barrera difícil de saltar, pero agradece la paciencia que le han mostrado. Sabe que en Chile está mucho más lejos de su familia y amigos, sin embargo con Whatsapp y Facebook se mantiene comunicado constantemente. Asegura que “lo que más me gusta del colegio son los alumnos, por supuesto, todos tienen gran alegría; están siempre con sonrisas y con buena disposición. Además es un colegio grande y hay muchas oportunidades de conocer el proyecto educativo y las tradiciones del colegio”. Comenta que el sábado 9 de abril estuvo junto a la liga de futbolistas de padres y ex alumnos: “It was a great time!”.
Generosidad de espíritu
“Mi destinación es hasta cuando nuestro provincial, el padre Thomas O’Hara, me llame. Ojalá fuera varios años, porque mi deseo es aprender español y la cultura georgiana”. Aunque lleva dos meses en Chile ya tiene mucho que agradecer: “Ha sido un regalo ver la generosidad de la gente, la alegría de los alumnos, mis colegas en el Consejo Directivo me enseñan mucho de las políticas educativas y sus experiencias son profundas”. Al preguntarle por cómo desea ser recordado dice: “Ojalá que me recordaran por la generosidad de espíritu, los sacramentos y el servicio a las familias del Saint George’s College… tal vez mi sonrisa”, concluye.